¿Por qué nos hicimos ajedrecistas?

Esta mañana me he sentado en el salón de mi casa acompañando a mi padre. Yo quería hablarle de alguna idea rara que tengo en la cabeza para saber su opinión, y aunque él estaba con el ordenador se lo he comentado. Simplemente quería que alguien me escuchara… pero, de repente, he visto su mirada. No había oído nada de lo que yo le había dicho. Sus ojos se movían rápido, visualizando la pantalla. »

Y yo, ¿por qué sigo jugando al ajedrez?

Corría el frío invierno de 1981 en Mataró (Barcelona) y mis amigos no jugaban tanto en la calle, como en otras épocas del año. Mataró (a 30 km. al norte de Barcelona) Una tarde, bajé a la calle y sólo me encontré a mi amigo Rafalín. Nuestros consistían en jugar al escondite, policías y ladrones, saltar al potro, jugar a las cartas y un largo etcétera en los que todos tenían en común que eran para más de cuatro personas. »

¿Es el ajedrez aburrido?

En una sociedad dominada por la televisión, el fútbol es por inercia el dueño del entretenimiento en España. Mientras se han pagado los 220 millones de euros por Neymar para que de piruetas en el Paris Sant Germaint; Francisco Vallejo -mejor jugador español de ajedrez- reconocía hace poco que recibía 2.000 euros al año de subvención para su preparación como ajedrecista profesional. El fútbol genera mucho dinero y es un deporte “entretenido” de ver. »

Fortalezas y otros planes defensivos en ajedrez

Según el Diccionario de la Real Academia, la palabra fortaleza tiene 6 definiciones, de las cuales para este texto pueden encajar las siguientes: Defensa natural que tiene un lugar o puesto por su misma situación Recinto fortificado, como un castillo, ciudadela, etc. En el ajedrez podemos aplicar estas definiciones a las ubicaciones de piezas del bando en desventaja que impiden el progreso del jugador rival »

El ajedrez y sus estados mentales

Lo admito, no tengo ni idea de ajedrez. Me considero a mí mismo el típico jugador que ha llegado hasta donde está sin tener ni idea de cómo lo ha hecho. He quedado varias veces campeón regional en diferentes categorías juveniles, y he conseguido el título de Maestro Fide, que son los logros de los que me considero más orgulloso. Sin embargo, cuando me siento ante el tablero de cara a la próxima partida sigo sin confiar plenamente en ser capaz de superar a mi rival. »